Activismo en favor de las tortugas marinas

Un factor importante para que la conservación de las especies de tortugas marinas del litoral cubano sea sostenible en el tiempo es educar a las futuras generaciones sobre la importancia de las mismas. Es así que a través de la educación ambiental en las escuelas y talleres se puede dar a conocer más sobre las tortugas marinas, su ciclo de vida, las amenazas y cómo ayudarlas.

Los esfuerzos de conservación de estas especies deben ir acompañados de estrategias de educación ambiental, dentro y fuera de las escuelas, con la finalidad de impactar positivamente no solo en los niños, sino en las comunidades costeras en general.

Ods

El desarrollo sostenible es una tarea de todos. La Organización de Naciones Unidas (ONU) presenta y promueve a través de la música de Cubanos en la Red su agenda con vista al año 2030.

Pachamama Game Jam

Idearon el concepto y desarrollo del Pachamama Game Jam en la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI), simultánea de programación de videojuegos ambientales, para lograr producir herramientas educativas de valor para el país vinculando a las Naciones Unidas para su crecimiento. Recibió un premio internacional junto a otros proyectos cubanos, en los Premios de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (CMSI), celebrado en el Centro Internacional de Conferencias de Ginebra el 13 de junio, como parte del Foro anual de la CMSI 2017.

Festival cubano reúne voluntades a favor de la naturaleza

Madre tierra en Varadero

El Festival Madre Tierra es un evento participativo de educación ambiental con fuerte componente artístico.

En él se realizan conciertos, audiovisuales, eventos teóricos, maratones, siembra de árboles, exposiciones de artes plásticas y fotografía, obras de teatro, competencias de programación de video juegos, programas de radio y televisión, recogidas de materias primas, saneamientos de ríos y litorales y otras acciones para respetar y proteger el medioambiente.

Durante su celebración se encadenan más de 500 instituciones, a las que se suman unas 300 mil personas en todo el país que se contagian de alegremia, asumiendo el equilibrio y la armonía de la naturaleza como modo vida.

El objetivo es poder mantener la participación abierta y gratuita en la celebración, los eventos teóricos y otras actividades, como una fiesta de bien público y sin fines de lucro. El Festival Madre Tierra es un evento cultural que transciende gremios, edades, disciplinas y abarca como hecho cultural a la pluralidad de los cuban@s. Las imágenes expresan más que las palabras y las siguientes explican que es el festival, vale la pena disfrutar a Cuba de fiesta por la vida.

El Festival en alianza con la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), convoca encuentros de programadores de videojuegos de todo el país que tomando un tema ambiental, como el manejo y control de las especies exóticas invasoras, o la conservación de los ecosistemas de los suelos, programan videojuegos didácticos que luego sirven para la educación de niños, niñas y jóvenes.

En los eventos teóricos se abordan diversos temas como manejo de los suelos, manejo del agua, uso de energías renovables, soberanía alimentaria, cambio climático, conservación de especies endémicas, promoción de salud, lucha contra la violencia y muchos otros que contribuyen a una vida en armonía con la naturaleza

Se hacen ferias de reciclaje y responsabilidad ambiental donde las instituciones exponen lo que hacen en esta materia a lo largo de todo el año

Se realizan numerosos conciertos, donde cada año más de 200 artistas de todo el país, se incorporan a cantarle a la vida. De igual forma pasa con el teatro, la danza, la fotografía, la literatura y las artes plásticas.

También un gran número de programas de radio y televisión se incorporan cada año a esta fiesta, contribuyendo con la transformación de muchas comunidades

Guayaberas de un cubano ecologista

Guayaberas de un cubano ecologista es un proyecto de fuerte impacto humano y medioambientalista. En él no importa el universo estético visto desde una urna de cristal, de manera aislada, sino imbricado con valores antropológicos, sociales y comunitarios que rebasan los límites mismos de lo artístico. No se trata aquí del ARTE en mayúsculas, ceñido a las élites imperantes en el contexto cubano actual. Al revisar la nómina de artistas participantes se constata una marcada democracia en materia de selección: desde artistas consagrados hasta muy noveles o desconocidos; desde aquellos que poseen obras bien sólidas hasta otros que se encuentran en fases de búsquedas y tanteos.

La iniciativa, liderada por Osmel Francis Turner (director de la agrupación Cubanos en la red) y por el joven artista Manolo Vidal Suárez, consiste en la invitación a un grupo numeroso de pintores cubanos para que dejen plasmada su obra en múltiples guayaberas, las que luego formarán parte de exposiciones y pasarelas bien dinámicas. Todo ello con total libertad desde el punto de vista expresivo y semántico, aunque generalmente las propuestas se vinculan con preocupaciones que atañen al accionar del hombre sobre su entorno, con las correspondientes consecuencias que este implica. Del mismo modo que en los temas de la agrupación, en estas “guayaberas-cuadros” se fusionan tradición y contemporaneidad, alta y baja cultura, cultura popular y su antítesis, en todos
los casos de maneras muy armónicas. Una apuesta por la democratización del acto creativo, donde solo bastan la voluntad y las ganas de hacer; el soporte está disponible, esperando por los osados que deseen sumarse.

Han pintado reconocidos artistas como Jorge Perugorría, Zaida del Río, Mendive, Nelson Domínguez, Sandor, Jaquine, Choco, Maikel Herrera, Bárbara Sánchez Novoa, Fuster, artistas de Jamaica, Guatemala y Estados Unidos.

Festival del Río

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Desde el 2002 el grupo ha celebrado el Día Mundial del agua. A partir del 2016 toma fuerza organizando el Festival del Río junto al grupo Huellas en coauspicio con el Gran Parque Metropolitano de La Habana, con actividades similares a las del Festival Madre Tierra dedicadas netamente al agua.

Preservan tortugas marinas en Cayo Largo del Sur

Localizada en el extremo este del Archipiélago de los Canarreos está Cayo Largo del Sur, pequeño islote que pertenece geográficamente al municipio especial de Isla de la Juventud, cuya ciudad cabecera dista a 135 kilómetros (km) del destino turístico. Con una superficie total de 37,5 km cuadrados y casi 25 km de longitud de playa, el sitio figura entre los puntos del planeta cuyas playas con excelentes dunas sirven a las tortugas marinas, que habitan las cálidas aguas del Caribe, para nidificar cada año de mayo a septiembre. Hasta la estación de rescate de la tortuga marina llega la ACN para dialogar con el biólogo Gonzalo Nodarse Andreu, especialista con vasta experiencia en el monitoreo , protección y conservación de esos reptiles carismáticos en peligro de extinción a escala planetaria. Es aquí donde más anidan las tortugas verde (Chelonia mydas) y la caguama (Caretta caretta) desde las 10 de la noche hasta las seis de la mañana y en aras de preservar este escenario de nidificación es que se realizan hace más de 20 años actividades de educación ambiental con los vacacionistas, comenta. En esta estación, incluida en el itinerario de las opciones extrahoteleras de Cayo Largo, se les sugiere a los visitantes no desandar en las noches por la duna porque pueden ser percibidos por los réptiles como un peligro potencial y se perdería la posibilidad de ayudar a preservar la población de esos ejemplares en Mar Caribe, dice. A veces la falta de información incide en que se las personas caminen o coloquen tumbonas encima de los nidos y en consecuencia se compacte la arena y dificulte el nacimiento; además por la alta densidad de nidos se han encontrado algunos muy cerca del mar, con riesgo de ser arrastrados por las olas, refiere. Las tortugas lora, tinglado, golfina, aplanada, carey, camagua y verde aparecen en el libro rojo de la Unión para la Conservación de la Naturaleza y en el apéndice uno de la Convención Internacional para el Comercio de especies amenazadas de la Flora y la Fauna Silvestres. Por eso, hace más de dos décadas existen personas sensibilizadas con esta actividad, refiere. Con la participación de los vacacionistas, los huevos se trasladan para el área de incubación, donde se mantienen hasta que eclosionan, a los 50 días los neonatos se colocan en estanques y antes de los siete días, desde el mismo lugar donde realizamos la extracción de los huevos los liberamos, apunta.